Las clases públicas de Darío Sztajnszrajber volvieron…
en forma de libros. En el Tomo I, el divulgador elige seis temas (amor,
pos-amor, Dios, verdad, pos-verdad y democracia) para dar forma a un texto que
conserva el tono coloquial de sus exposiciones.
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La Filosofía como creadora de problemas
La finalidad de la Filosofía no es resolver problemas, sino todo lo contrario: ¡busca crearlos! Bajo esta premisa tan llamativa –un caballito de batalla que utiliza siempre Darío Sztajnszrajber– se presenta Filosofía a Martillazos como una invitación a deconstruir ideas cotidianas que, a fuerza de costumbre y hábitos, han sido automatizadas.
Este primer tomo es bastante extenso. Son seis capítulos que se basan en una serie de clases públicas dictadas por el autor.
Como todo lo que suele hacer Darío, éste es un libro apto para todo público y muy ameno. Es también medio un choreo, porque básicamente lo que hizo fue transcribir, casi al pie de la letra, seis clases/exposiciones que dio para la Facultad Libre de Rosario entre 2015 y 2018.
Los capítulos abordan problemáticas seductoras para los tiempos que corren: El amor y el pos-amor, Dios, la verdad y la pos-verdad y, finalmente, la democracia.
¿Por qué eligió estos temas y no otros para este Tomo 1? Lo desconozco y admito que me resultó un poco frustrante. El capítulo 1 es “El amor” y el segundo es “Post-Amor”, donde se repiten varios subtemas o ideas. Algo similar ocurre con las clases 4 y 5, sobre la verdad y la pos-verdad. Esto hace que el libro termine quedando un tanto monotemático.
Me escuché todas las clases que dio Darío para la Facultad Libre (están en Youtube y son ideales para las tardes de oficina). Y, por eso, sé que ha dado charlas sobre temas mucho más variados y fascinantes. Creo que un mejor mix habría sido beneficioso para este libro. Qué se yo: el poder, la educación, el tiempo, lo femenino, etc.
Filosofando coloquialmente
Si bien este primer tomo de Filosofía a Martillazos es agradable de leer, definitivamente está un par de escalones debajo de otras obras del autor. Filosofía en 11 frases (que tiene su reseña en el blog) y ¿Para qué sirve la filosofía? me parecen muy superiores y con una profundidad/complejidad mayor. Son textos más complejos, más sólidos. Más literarios, incluso.
En Filosofía a Martillazos, cada capítulo es una suerte de transcripción de la clase real que dio Darío en su momento. Sabemos que una charla o un discurso nunca están igual de trabajados que un texto planificado previamente. Aparecen las interrupciones, el irse por las ramas, el no cerrar un tema para pasar a otro…
A mí me encanta el Darío que improvisa y te habla como si estuvieras en un bar con una birra de por medio. Podría escucharlo por horas (y lo he hecho). Pero no es lo mismo leer una clase oral convertida a texto; como que algo ahí no termina de encajar.
Darío incorporó algunos diálogos que tuvo con sus alumnos en el espacio de la clase, generando así que el relato sea más dinámico; aun así, el estilo a mí no terminó de convencer del todo. No me molestó el tono coloquial, sino más bien el hecho de que el capítulo sea toda la clase entera, sin cortes, subtítulos o algún tipo de división.
La estructura se podría haber trabajado un poco más, con subtítulos entre cada
clase para volver el contenido más fácil de consumir. Los capítulos son realmente
muy largos y se me hacían un poco pesados. El texto hay que leerlo con mucha
calma. Me pasaba que terminaba leyendo unas páginas y marcando con lápiz adonde
había quedado porque no hay ningún corte natural.
Reflexiones de la modernidad
Más allá de este detalle, Darío expresa sus ideas con muchísima claridad y concisión. Esto es esperable de un divulgador con tanta trayectoria como él. Tiene una habilidad envidiable (y fascinante) para bajar la filosofía a Tierra, haciendo uso de analogías, ejemplos y referencias con las que podemos entender fácilmente. Incluso hay muchos toques humorísticos que se disfrutan.
El material con el que trabaja Darío definitivamente invita a la reflexión. De hecho, me disparó varias ideas para notas en el blog o incluso para algunos cuentitos. Estoy craneando uno basado en algunos postulados del capítulo de la democracia. Probablemente salga este mes.
Darío es a la divulgación filosófica como Adrián Paenza es a la Matemática y Hernán Casciari a la Literatura. Son personas extraordinarias que han logrado acomodar disciplinas duras e, históricamente, poco populares, para volverlas atractivas para las masas.
El caso de Darío es quizás más notable, porque entrarle a la filosofía es realmente complicado. Siempre fue una disciplina considerada de la elite, sólo apta para mentes prodigiosas. A menudo se la encara desde enfoques poco amables o se requieren de muchos conocimientos previos para poder comprender.
Sin embargo, Sztajnszrajber siempre ha logrado encontrar el equilibrio entre lo intelectual y lo entretenido. Su mayor virtud se encuentra en la forma en que logra abordar discusiones relativas a la naturaleza humana de formas muy agradables.
En este sentido, Filosofía a Martillazos es una extensión más de Darío. Un trabajo serio que permite abordar temas complejos sin exigir lectores especialistas.
Es un libro superficial, si se quiere, que
aprovecha el humor y el tono coloquial para introducir contenidos de interés
que pueden disfrutar lectores amateurs y también el público más exigente.
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=>> Otros posts sobre DARIO Z y la FILOSOFÍA en el blog: “Salir de la caverna: Darío, filosofía y rock”; “Filosofía en 11 frases: un libro de Darío Sztajnszrajber”; “Heráclito: el filósofo del cambio”; “A Glitch in the Matrix: un documental de Rodney Ascher”; “Albert Camus y el absurdo”; “Kant: en busca de una ley universal”.
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A favor de D.
ResponderEliminarFui a ver su espectáculo "Desencajados", me había gustado mucho. Y lo seguía en el programa Desiguales y Mentira la Verdad, ahora le perdí un poco el rastro.
Este libro debe estar muy bueno, me diste ganas de leerlo.
Abrazos cráneo total!
Sí, tal cual. Son modas. Yo tuve años donde sólo escuchaba y seguía a Darío, o que sólo leía comics de Batman. Por momentos me agarra la nostalgia por Les Luthiers y estos meses volviendo a ver/escuchar todo su material.
EliminarHoy en día estoy muy metido con varios podcasts, pero Darío siempre está dando vueltas para inyectar un poco de filosofía mundana a esta vida.
Igual el libro lo leí porque me lo regalaron, sinceramente. No lo había salido a buscar.
¡Abrazo!