¿Te gusta el contenido de mi blog? Ayudame a seguir manteniéndolo

Invitame un café en cafecito.app
Por el momento, sólo podés invitar cafecitos si sos de Argentina. Ahora sí, lee tranquilo.

jueves, 10 de abril de 2014

Grandes juegos de mesa (III): “Monopoly, el capitalismo como un juego”

Uno de mis juegos de mesa preferidos es el protagonista de este tercer episodio. Aun hoy sigo jugando Monopoly con mi hermanito menor.

Lanzado originalmente en 1935, se trata del más popular del mundo entero (más allá de, bueno, el ajedrez). En la práctica, el juego involucra menos tiempo realizando transacciones de lo que uno pensaría y, en proporción, mucho más tiempo hiriendo de por vida las relaciones entre hermanos. Me animo a decir –con humor, claro– que es una de las experiencias más amorales de la historia del entretenimiento (más, inclusive, que el ingrato T.E.G.)

La historia oficial relata que, durante la alza de la Gran Depresión (años 30 en EE.UU), un vendedor desempleado (Charles Darrow) le propuso la idea a los hermanos Parker. Sin embargo, algunos investigadores han sugerido que el conocido juego de tablero tiene una perturbadora historia de origen

En 1904, una tal Elizabeth Magie habría patentado The Landlord's Game, con exactamente la misma premisa. Al fin y al cabo, todo (hoy en día) es un remix, ¿no?

Una particularidad del Monopoly es que sus reglas tienden a ser muy flexibles. Las clásicas reglas son extremadamente chatas, y han surgido algunas reglas “off-the-book” que hacen de la experiencia algo mucho más ameno. Informalmente se conocen como las reglas del Monopoly Deluxe. La primera de ellas es, obviamente, “¿qué hacemos con el casillero de Libre Estacionamiento?”. Esta es la controversia más fuerte. ¿La solución general? Un lugar para acumular todos los impuestos pagados al banco, y para que el alma afortunada que caiga allí los retire en efectivo.

DE YAPA: Lo que sucedería si el Monopoly fuera verdaderamente honesto => LINK.

Algo interesante del Monopoly es el simbolismo que guardan las fichas: en modelo original, el auto, el tanque, el jinete y el cañón, todos representan a la clase alta; mientras tanto: la carretilla, la bota, la planta y el dedal representan a los trabajadores, los obreros asalariados. ¿Cuál suelen elegir ustedes?

Otra marca de la extensa popularidad del juego es la cantidad de spin-offs que tuvo: Star Wars Monopoly, Simpsons Monopoly, John Deere Monopoly (¿?), Scooby-Doo Monopoly. ¡Cómo olvidar “El Estanciero”, la versión ampliamente conocida en Argentina. Hay una variante de “Batman y Robin Monopoly” (seguramente mejor que la película) y otra de los Beatles. Al parecer esta página lista todas sus variantes. Fue actualizada este 1 de abril por última vez, y el registro asciende a 2488 versiones.

Las referencias al Monopoly en los Simpson abundan. En varios episodios se los ve jugando al clásico o bien a variantes bizarras como el “Krabappelly”. En el célebre episodio donde Burns encuentra petróleo debajo de la escuela ocurre este diálogo.

«Burns: Tengo un monopolio que preservar. ¡Tengo la Compañía Eléctrica y la Compañía de Agua! Además del hotel en la Avenida Báltica
Skinner: Ese hotel apesta y su monopolio es patético.»
  


Cuando uno se lo pone a pensar, tiene poco de estrategia per se y sí mucho de suerte. Claro que hay que tener habilidad para reconocer un buen negocio, o realizar el canje correcto. Pero, al final del día, hay que ser honesto: es tirar los dados, rezar para pasar por la zona de la muerte y poder poner hoteles en tus preciadas propiedades naranjas. Una maravilla.


El punto es probar que el capitalismo es siempre destructivo e injusto (¿aunque si es injusto con todos, eso no lo hace justo? Todos vamos a querer seguir jugándo para tener, algún día, la posibilidad de quedarnos con todo lo de nuestros amigos. Hay algo de perturbador en la necesidad de tomar turnos para torturarse uno a otro, ¿no? ¿Qué piensan del “Monopoly”? ¿Lo han jugado?

………………………………………………………………………………………………….

=>> Otras notas relacionadas con grandes juegos de mesa: “Clue: ¿quién es el asesino?”; “T.E.G, muy parecido a la guerra”; la complejidad narrativa en el cine de terror (sobre SAW: El juego del miedo); El ajedrez en la ficción: cine y literatura.  <==

 ………………………………………………………………………………………………….

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Quizás te pueda llegar a interesar...