INSIDE es
el aclamado plataformero de 2016 desarrollado por Playdead, la empresa
responsable de Limbo (2010). Pese a contar con numerosos elementos
narrativos y mecánicas en común, ambos videojuegos son historias completamente
diferentes. En esta nota quiero reseñar esta joyita del gaming independiente.
***
Cuando Limbo redefinió el gaming
Se está viviendo un enorme momento para los
videojuegos desarrollados de forma independiente, que hoy están tan en la mira
como las grandes producciones. En el 2010, la empresa danesa Playdead fue una de las causantes de
que el fenómeno indie estallara en
popularidad.
Limbo es
una pequeña y excelente obra maestra que todos deberían jugar, al menos, una
vez. Es un juego que, junto a Braid, literalmente
redefinió el mundo gamer cuando salió a la venta. Yo lo reseñé en esta
nota del blog.
Por aquella época se decía que “un indie nunca iba
a ser GoTY”. Hoy tenemos Celeste, The Messenger, Dead Cells, Undertale (y
su continuación Deltarune), Into the Breach, The Hex (que tuvo
su reseña por acá), Moonlighter (también
hermoso) y muchos otros más.
***
INSIDE como
sci-fi distópico
A primera vista, INSIDE parece ser la evolución lógica de lo que la empresa hizo en
su primer título. Otra vez jugás como un niño sin nombre y sin rostro que debe
resolver todo tipo de puzzles y evitar morir de formas horribles. La diferencia
fundamental es que, mientras el primero era un relato de terror sobrenatural,
acá estamos ante un mundo más mecánico y tecnológico.
En esencia, INSIDE
es un sci-fi distópico, donde atravesamos un mundo de crueldad y
experimentación humana. El contexto sigue siendo bastante terrorífico. A mí me
resultó mucho más inmersivo y atmosférico, aunque los puzzles son decididamente
más sencillos que en Limbo.
La narrativa parece tener lugar en un mundo donde
se está probando algún tipo de tecnología de control mental en humanos. De
hecho, una de las principales mecánicas que toma INSIDE es la posibilidad de utilizar personas aparentemente muertas
como cuerpos remotos.
No quiero comentar demasiado porque las constantes
sorpresas son una gran parte de lo que lo hace tan divertido.
En INSIDE
todo intenta matarte
En cuanto a la historia, es tan ambigua como la del
primer juego, aunque me da la sensación de que esta vuelta todo es menos
“simbólico” y un poco más sencillo de comprender.
INSIDE sí
brinda algunas respuestas a sus preguntas más confusas. Por ejemplo, es
ampliamente aceptado que el final secreto revela la verdadera identidad de
aquel niño atravesando un mundo en ruinas y “arrastrado” al centro de un
proyecto oscuro.
A diferencia de su predecesor, el juego sí utiliza una
paleta de colores que no es monocromática. Esto permite que sea más fácil ver
cuando los objetos y personajes están a la luz (o simplemente son fuentes de
luz). Sin embargo, vale aclarar que los colores son muy insaturados para ayudar
a mantener la atmósfera opresiva.
Acá todo intenta matarte, hasta el punto en el que
estás nervioso alrededor de unos pequeños e inofensivos pollitos o dentro de un
maizal.
La sensación de agobio está especialmente bien
lograda. Ayuda a conectar con ese niño sin rostro al que movemos de un lado
para otro en aquella sociedad distópica. Para seguir adelante hay que usar la
intuición y superar el miedo. Es necesario ser veloz, pero también inteligente
para no cometer errores. Porque en INSIDE
cada error es fatal.
Un festín
para los ojos
Dicho sea de paso, el juego se ve increíble. Cada
escena es digna de ser colocada como fondo de escritorio o en un mural.
Realmente es una delicia a nivel visual como pocas veces se ha visto. Todo el
juego te puede llevar unas 5 o 6 horas como máximo y funciona como una enorme
escena sin cortes, donde podés continuar avanzando de forma ininterrumpida.
Lo que más disfruto de este tipo de experiencias es
que los puzzles y obstáculos están diseñados de tal forma que podemos descubrir
la respuesta con mera intuición. INSIDE
no tiene tutoriales, diálogos o textos, pero te va llevando a encontrar la
solución a los problemas que, progresivamente, va presentando.
Si bien es un plataformero en 2 dimensiones, los
desarrolladores estuvieron muy inteligentes para aprovechar el motor tridimensional
que utiliza.
Esto es especialmente notable con los puzzles, que
están más integrados que en Limbo (donde
a veces el artificio rompía la inmersión). En cambio, INSIDE pone foco en la progresión natural y sus obstáculos parecen
más parte del ambiente que algo artificial.
Palabras
finales
INSIDE es
absolutamente recomendado. Al ser un hermoso festín visual que puede terminarse
en apenas algunas horas, no hay motivo por el cual no darle una chance. En Steam suele conseguirse muy barato.
Si tengo que compararlo con Limbo –y es inevitable hacerlo– me resultó menos desafiante (los
puzzles eran relativamente fáciles) pero bastante más tenso.
Que quede claro: no critico la falta de un mayor desafío,
porque esto le permite ser más experimental y atmosférico. Y realmente tiene
momentos gloriosos. Mientras lo jugaba tenía una gran sonrisa en mi rostro. Ni
hablar de cuando festejás en voz alta por encontrarle la vuelta a un lugar en
el que estabas trabado.
INSIDE es
creativo, atento a cada detalle, estéticamente impecable y de un apartado
técnico admirable. El terror que te genera no es el de un jump-scare que te
sobresalta, sino esa sensación en la boca del estómago cuando te ponés a pensar
en la inevitabilidad de la muerte. Y eso es tremendo.
……………………………………………………………
=>> Otros posts sobre VIDEOJUEGOS en el blog: “Limbo:
un terrorífico universo de luces y sombras”; “La
filosofía detrás de BioShock”; “Tres
videojuegos para amantes de lo retro”; “La
fascinante pesadilla pixelada de IMSCARED”; “Arte
y videojuegos: Shadow of the Colossus”; “Moralidad
y consecuencias en Undertale”.
……………………………………………………………
► Podés seguir las nuevas
notas y novedades (además de humor y críticas de cine) en mi
fan-page: http://www.facebook.com/sivoriluciano. Si te gustó, ¡compartilo o dejá
un comentario!
El INSIDE es un juego maravilloso. Yo encontré el LIMBO por casualidad, y de ahí llegué al INSIDE.
ResponderEliminarMe encanta como sin necesidad de dialogos o textos, con muy pocos botones, lograr hacer un juego tan intuitivo.
La historia puede generar muchas incógnitas: Quien es el niño? de donde viene? a donde va? en que años están? donde? como se escapo, si es que se escapo?? y aun así te mete en la historia en seguida y solo pensás en escapar y sobrevivir con él.
Gran juego. Muy bueno juego. Altamente recomendable. Cortito e inolvidable. Tendrían que hacer una película (??)