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miércoles, 25 de septiembre de 2024

“El asesinato de Pitágoras”, una novela de Marcos Chicot

 

Me topé con este thriller atrapante que tiene una sorprendente base histórica. Reseña de “El asesinato de Pitágoras”, una novela épica del español Marcos Chicot que te transporta a la cuna del mundo: Grecia.



***

 

 

La búsqueda de un sucesor

Charlando con una amiga de Neuquén (que también tiene el gustito por la lectura) me prestó este librito que ella “pensó que me iba a gustar”. Lo tomé sin saber absolutamente nada de la trama ni del autor.

Al principio me imaginé que Marcos Chicot sería una suerte de Dan Brown español, pero ubicando la historia en la Antigua Grecia en lugar de la actualidad. Pronto entendí que, si bien hay cierta inspiración, su obra va por otro lado.

El foco no está puesto en el uso de criptografía, símbolos y acertijos que los personajes deben resolver, sino en la intriga política y el misterio.

El argumento se desarrolla en Grecia, en torno al siglo VI a.C. Pitágoras, el famoso matemático y filósofo griego, tiene 77 años y está buscando a su sucesor. El matemático es un líder carismático de una comunidad que practica un estilo de vida basado en principios filosóficos y espirituales.

El conflicto se dispara cuando, en medio de la elección de su sucesor, una serie de brutales asesinatos sacude a la comunidad pitagórica. Esto genera la intriga central de la novela: ¿quién busca destruir a Pitágoras y sus seguidores?  Y sobre todo, ¿por qué?



Para ayudar a Pitágoras, se suman el investigador egipcio Akenón, una especie de Philip Marlowe por ser fornido, duro, con un considerable sentido del honor y sin problemas para operar al margen de la ley. También está la enigmática Ariadna, hija del matemático.

 

Game of Thrones en Grecia…

Lo interesante de El Asesinato de Pitágoras es que gran parte de los hechos y los personajes son reales (o están basados en personajes reales). Tenemos, por ejemplo, al sibarita Glauco, el monstruoso Bóreas, el vengativo Cilón y, sobre todo, el misterioso desconocido que está utilizando sus capacidades prodigiosas para sembrar caos y muerte.

La novela es larga (620 páginas… ¡en tu cara Stephen King!) y, en general, todo es bastante atrapante. La estructura de capítulos cortos siempre te va dejando con ganas de más.

Como thriller histórico creo que funciona súper bien. Toda la ambientación y parte divulgativa merece alabanzas para Chicot. Es admirable el trabajo de documentación y recreación histórica de la comunidad pitagórica y sus enseñanzas. 

Al terminar el libro leí varias entrevistas y documentos de su propia página para entender todo el proceso creativo. ¡Es una bestialidad que le llevó años de investigación!

Me gustó también que la historia no solo es un thriller de asesinatos, sino que además se exploran temas filosóficos, éticos y hasta matemáticos, como la naturaleza del poder, el conocimiento y diversas teorías pitagóricas (el número pi, la proporción áurea, los números irracionales, etc).

La trama comienza relativamente simple… con un extraño asesinato y sólo un pequeño puñado de personajes. Pero, a medida que progresa, todo va creciendo de forma épica. Van apareciendo escenas eróticas picantes, una batalla sanguinaria de gran escala, torturas y matanzas al mejor estilo Game of Thrones y explicaciones matemáticas de gran precisión.

 

Una de cal y una de arena

Sí, es verdad que el libro se me hizo un poco largo. Especialmente sobre la mitad donde el foco se va de Akenón y Ariadna para centrarnos en otros personajes secundarios que no me interesaban tanto. Capaz que hay una cincuenta o setenta páginas que se podrían haber ahorrado.

Ya que estoy un poco criticón, el continuo intercambio de punto de vista de los personajes, en ocasiones en el mismo capítulo o inclusive en un mismo párrafo, resulta un poco fastidioso. No termina de molestar, obvio, pero a veces me preguntaba la justificación detrás de la estructura de capítulos elegida.

Volviendo a los aspectos positivos, como entusiasta de la filosofía (y estar algo familiarizado con el legado matemático griego), me gustó descubrir que Pitágoras fue más allá que un pensador matemático.



El tipo resultó ser un líder intelectual y espiritual casi tan influyente como lo fueron Jesús, Mahoma, Confucio o Buda en sus respectivos momentos. Nunca imaginé que su “secta” era en realidad una numerosa hermandad que se extendía por varias ciudades de la Magna Grecia y tenía un verdadero poder político.

Me tomó bastante terminar el libro, pero no porque haya sido aburrido. Lo arranqué en mayo y en el medio fui leyendo otras cosas. El problema fue que es demasiado grande y gordo como para cargarlo en la mochila, entonces lo agarraba unas horas antes de dormir y no lo llevé a mis numerosos viajes.

 

Palabras finales

Pese a mi queja del P.O.V de algunos capítulos, el hecho de que sean cortos y rápidos te permite darle dinamismo a la historia. Muchas veces cambiás de episodio y no seguimos con lo anterior, sino que vamos a otra parte, por lo que uno quiere seguir para ver para donde va la cosa.

El Asesinato de Pitágoras hasta se hace lugar para una historia de amor atractiva que no entorpece el enigma principal.  

Por cierto, si quieren saber un poquito más sobre los años dedicados a la investigación para escribir El asesinato de Pitágoras, pueden leerlo acá: "La historia detrás de la novela".

Eso sí, preparen los Carilina elite doble suave, porque el final del texto de Marcos Chitos los va a movilizar un montón. O por lo menos eso me pasó a mí.

 

Ahora que ha sido nº1 en Internet durante cinco meses seguidos, y que en papel ha comenzado a publicarse con fuerza en varios países, me siento bendecido por los dioses cuando mi hija Lucía abre un ejemplar, me mira con su sonrisa especial mientras señala mi foto, y grita:

—¡Papá!

Sí, princesa, papá ha escrito este libro para ti.”

 

En ese mismo link encuentran también una sección que me resultó fascinante. En “Material adicional”, el autor cuenta sobre su colección de monedas antiguas (que tienen un papel central en la trama), las fichas de personajes que armó, mapas de localizaciones y hasta un mapa del palacio de Glauco. Todo es realmente fascinante.



En fin, hasta la próxima reseña literaria.


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2 comentarios:

  1. No conozco al libro ni a su autor. Como mínimo resulta interesante, leyendo la reseña no pude evitar pensar en "el nombre de la rosa", ¿será una relación posible?

    Saludos,
    J.

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    Respuestas
    1. Puede haber un intertexto ahí con Umberto Eco, sí, quizás incluso con Pérez-Reverte... pero para mí la asociación más rápida es Dan Brown. Yo tampoco no sabía nada del flaco ni del libro. No creo que entre en mi TOP de lecturas del año, pero banco igual.

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