Uno puede estar tentado a pensar que tenemos que
culpar a Stephenie Meyer por esta
nueva ola de vampiros sensibles, chispeantes y sexys. Pero en realidad fue otra
mujer la responsable de la popularidad de estos monstruos: Anne Rice. En esta nota voy a explorar la adaptación de una de sus
mejores novelas: Entrevista con un
vampiro (1994).
***
El verdadero
Crepúsculo
Anne Rice
escribió ficción de vampiros que se seducen unos a otros mucho antes de que
fuera cool. O, dicho de otra forma, Rice escribió ficción gótica y erótica
antes de que los géneros colapsaran en el desastre que tenemos hoy.
Fue en 1976 cuando la autora tomó el clásico mito
del Drácula de Bram Stoker –la idea de que los vampiros son cazadores despiadados,
sin consciencia y con un apetito insaciable por la sangre– y le dio una vuelta
de tuerca, reinventando este tipo de relatos.
Luego de publicar la novela, ella misma escribió un
guión cinematográfico y pasó las siguientes dos décadas peleándose con
Hollywood y todos sus escritores que buscaron retorcer la esencia de la obra.
Los grandes estudios quisieron eliminar todo lo oscuro y sensual de su oscuro y
sensual libro que estaba pensado para una audiencia específica. Pero ya llegaremos
a esto.
¿De qué va
la historia?
Entrevista
con un vampiro es la primera de las Crónicas Vampíricas, una saga literaria de doce novelas que
siguen al personaje Lestat de Lioncourt
(Tom Cruise en la película) a lo largo de los siglos, a medida que va
conociendo a enigmáticos vampiros, buscando el sentido de su vida, el origen de
su especie y una forma de poder alimentarse manteniendo cierto código moral.
La adaptación de 1994, dirigida por Neil Jordan, es
una loca fusión entre fantasía gótica, romance melodramático, drama
existencialista, terror y película de época.
La protagoniza un elenco tremendo: un destacado Tom
Cruise, un apenas eficiente Brad Pitt, Antonio Banderas (quizás no la
mejor elección) , Christian Slater (sin demasiado para hacer) y una joven
y sorprendentemente sólida Kirsten Dunst
en uno de sus primeros roles (al año siguiente haría Jumanji).
La cosa es más o menos así. En el presente, el
vampiro Louis de Pointe du Lac (Brad
Pitt) le cuenta su vida a un joven reportero, Daniel Molloy (Christian Slater).
Resulta que en 1791, Louis era dueño de una plantación al sur de Luisiana,
América. Luego de la muerte de su esposa e hijo durante el parto, perdió todas
sus ganas de vivir, llegando a considerar el suicidio.
Fue entonces cuando se topó con Lestat, un egocéntrico,
agrandado y jocoso vampiro que lo transformó en uno de los suyos. Ambos inician
una relación que atraviesa siglos enteros.
La película fue un éxito de taquilla y hoy es
considerada un clásico de los noventa. Admito que no resistió demasiado el paso
del tiempo. Hoy se ve bastante tonta, con las pelucas, dientes falsos, efectos
especiales pobres y su tono extremadamente dramático. Sin embargo, pasada la
media hora se convierte en una experiencia fascinante. La verdad es que la
terminé disfrutando.
"Please to meet you...hope you guess my name..."
Lo interesante de Entrevista con un vampiro es que rápidamente se saca de encima los
viejos mitos (como el ajo o la estaca) para pasar a narrar una historia que
rompe con el molde tradicional del vampiro (antes identificado con las
adaptaciones Drácula y las
tradiciones europeas).
En su lugar, acá vemos a vampiros-humanos que sufren,
sienten y experimentan dolor al tener matar para sobrevivir.
El verdadero atractivo de la historia llega cuando
entra en escena la niña Claudia
(Kirsten Dunst en una de las mejores interpretaciones de un niño que alguna vez
vi). Vagando por las calles de Nueva Orleans, Louis encuentra a la niña junto
al cadáver putrefacto de su madre afectada por la plaga. Él no puede resistirse
más y se alimenta de ella.
Un momento más tarde, Lestat le revela a Louis que
la convirtió en vampiro para obligarlo a quedarse con ellos, formando una
extraña y atípica familia. Como toda clásica historia de abuso doméstico, las
cosas sólo empeoran a partir de este punto…
El subtexto
homo-erótico
El primer detalle que salta a la vista es el
subtexto homo-erótico. Lestat y Louis crían a un hijo juntos (que Lestat
convirtió en un intento de mantener a su Louis con él) y ambos pelean como una vieja
pareja de casados. Si bien la película no muestra nada sexual específicamente,
la relación entre ambos es muy íntima y está claro que va más allá de una sencilla
amistad.
A lo largo de la trama, el sexo adquiere una
importancia fundamental. No por su presencia, sino justamente todo lo
contrario, por su ausencia. Todos los
personajes son seres seductores, pasionales, románticos, especialmente bellos.
"Maldito sexy, alto y sensual Brad"
La obra literaria es mucho más explícita, con Louis
y Lestat literalmente compartiendo su ataúd por las noches. En la película, sin
embargo, la cuestión homo-erótica se trabaja con más sutileza, si bien tiene
una presencia innegable.
Entrevista
con un vampiro tiene dos claros momentos. La primera mitad se enfoca en
Lestat mientras que en la segunda hacen su aparición Armand (el personaje de Antonio Banderas) y todos los demás vampiros
de París.
Allí transcurre la que quizás sea mi escena favorita:
en el teatro “Les Vampires”, un grupo de chupasangres haciéndose pasar por
actores mata en escena a una joven que suplica ayuda ante la mirada de un
público asqueado que cree que ella está actuando. Brillante.
Existe también un juego de seducción entre Louis y Armand,
así como entre Claudia y Louis (elevando la temática a niveles
pseudo-incestuosos).
"Antonio... todo bien con vos, pero años haciendo películas y todavía no te sale el acento"
Nuestros
vampiros son diferentes
En cuando a sus poderes, estos vampiros tienen
súper fuerza y velocidad. Tanta velocidad que, de hecho, los humanos no pueden ni
verlos trasladarse. Estas habilidades tienden a aumentar con la edad. Ellos también
pueden leer la mente (un aspecto clave para el argumento de la película) y
caminar sobre las paredes, si bien éstas capacidades parecen variar entre
vampiro y vampiro. No pueden transformarse en animales como murciélagos y
algunos demuestran la capacidad de levitar.
Similar a Drácula,
el “don oscuro” no se traspasa solamente con una mordida, debe mezclarse la
sangre de vampiro con la de la víctima. Estos vampiros dejan de envejecer
cuando se convierten, haciendo que sea posible tener niños eternos (como
Claudia) pero está prohibido crearlos. Curiosamente, estos vampiros sí se
reflejan en los espejos.
Todos los métodos “tradicionales” para lidiar con
vampiros, como estacas de madera al corazón, símbolos religiosos, agua bendita,
ajo y plata, son “tonterías sin sentido” según Louis, y no funcionan contra
ellos. Sí necesitan dormir durante el día en ataúdes porque la luz solar los
debilita y lastima (al punto de poder matarlos si la exposición es desmedida –
otro punto clave de la historia).
La película muestra que el fuego los debilita mucho
y la decapitación es suficiente para matarlos, pero da la sensación de que sólo
otro vampiro tiene la suficiente fuerza y velocidad para hacerlo. La escena
final de Brad Pitt causando caos con la guadaña califica como uno de los
momentos más épicos del film.
Requieren de copiosas cantidades de sangre cada
noche para sobrevivir, siendo los humanos su mejor suministro. Pueden
sobrevivir con animales como ratas, pero esta dieta los mantiene apenas por
encima del nivel de inanición.
Consumir sangre de un cuerpo muerto los debilita
considerablemente… o directamente los mata, a menos que seas un vampiro tan
viejo como Lestat, quien parece ser lo suficientemente poderoso como para
sobrevivir este consumo y hasta las llamas de un mortal incendio.
Por último, los vampiros de Entrevista con un vampiro son extremadamente raros y parecen no
estar psicológicamente preparados para asumir la inmortalidad por mucho tiempo.
No logran adaptarse a los cambios del mundo, tienen depresiones
existencialistas y pierden el impulso para seguir viviendo. El más viejo tiene
apenas unos 400 años.
Claudia en una de sus clásicas manipulaciones
La adaptación que la autora amó
Para 1994, la película estaba finalmente en
producción, pero Anne Rice ya había perdido toda su fe en Hollywood (recordemos
que estuvo casi dos décadas entre idas y vueltas).
Y lo peor fue cuando se enteró que Tom Cruise representaría al antihéroe
Lestat. ¿Se imaginan? Uno escribe una novela de terror gótico y Hollywood toma
a tu homo-erótico dios sexual e inmortal para que el rol lo interprete el flaco
de Top Gun.
Rice estaba verdaderamente indignada con su
adaptación. Tanto que comenzó a hablar mal de la película sin siquiera haberla
visto. Se negó a ir a los pre-estrenos o a siquiera mirar fragmentos.
Eventualmente, uno de los productores le mandó una copia y ella se sentó sola
en su casa a verla. Quedó fascinada.
La saga literaria de Crónicas Vampíricas...
A Rice le gustó tanto que escribió una carta abierta de 8000
palabras a sus lectores describiéndola como “perfecta”, “impecable” y
“extraordinaria”. Amó la interpretación de Tom Cruise, la ambientación y la
estética.
Palabras
finales
En lo personal, creo que ésta es una interesante revisión
del mito vampírico. Tiene momentos creativos y te atrapa completamente durante
sus dos horas de duración. Es hija de su tiempo, una obra decididamente de los
noventa.
Hoy la ves y te puede parecer un tanto ridícula.
Cuesta acostumbrarse a Tom Cruise con peluca de ricitos rubios y dientes
puntiagudos falsos. Los efectos especiales son risibles. Sin embargo, la
narración te va comprando y vale la pena por las sólidas interpretaciones (de
nuevo, Kirsten Dunst es una maravilla) y los giros argumentales drásticos que
toma la historia.
Por cierto, si bien recomiendo darle una chance a Entrevista con un vampiro, lo mejor es
alejarse por completo de su secuela, La
reina de los condenados (2002).
No sólo tiene un valor de producción muchísimo más bajo, sino que además pierde
toda sutileza y elegancia, además de cambiar al Lestat de Cruise por un
olvidable Stuart Townsend.
……………………………………………………………
=>> Otros notas sobre ANÁLISIS DE CINE en el
blog: “Alphaville:
ciencia, poesía y ciberpunk”; “Juan
de los muertos: zombies en Cuba”; “12
grandes directores, 12 grandes películas (parte 2)”; “30$
de taquilla: el misterio de Zyzzyx Road”; “5
películas fundamentales de Woody Allen”
……………………………………………………………
► Podés seguir las nuevas
notas y novedades (además de humor y críticas de cine) en mi
fan-page: http://www.facebook.com/sivoriluciano. Si te gustó, ¡compartilo o dejá
un comentario!
Me parece que hay un abismo entre Crepusculo y Entrevista con un vampiro. En la película que reseñas, los vampiros son tan peligrosos como atormentados.
ResponderEliminarTiene sentido que los vampiros no resistan la inmortalidad, tal vez porque antes fueron humanos. Y es posible que la humanidad no esté preparada para lo que implica.
Me gustó lo de los vampiros como actores que actúan de vampiros, como la escena en que se alimentan de una mujer, mientras que los espectadores cree que es ficción.
Una gran película.
¡Esa escena del teatro es tremenda! Y la cara de Brad Pitt mientras ve lo que sucede es impagable. Concuerdo: gran película.
EliminarSoy un vampiro y me vuelvo a ser humano también en el momento que quiero. y soy uno de los hombres más temidos de mi país. Me convierto en vampiro gracias a la ayuda de un amigo que me presentó a un maestro vampiro al darme su correo electrónico. si quieres convertirte en un vampiro poderoso, contacta al reino de los vampiros en su correo electrónico worldofvampir@hotmail.com
ResponderEliminar