Almodóvar: cine al borde de un ataque de nervios

Aprovechando el estreno de Madres Paralelas, Netflix subió un gran catálogo de Pedro Almodóvar, un icónico director español conocido por su maestría para combinar melodrama, comedia y comentarios sociales inteligentes.

 

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La España pos guerra civil

Comenzando en los años 70, la muerte de Francisco Franco condujo a una apertura masiva y al florecimiento de la cultura española moderna, con el cine, la música y otras artes teniendo la oportunidad de experimentar después de cuatro décadas de represión.

Como argentinos podemos relacionarnos con esa época, porque en nuestro país ocurrió algo muy similar luego de la dictadura militar. En España aparecieron subculturas volando por todas partes, aunque la mayoría había existido incluso en la época de Franco, ya no estaban obligadas a permanecer en la clandestinidad.

Pedro Almodóvar, ya declarado gay (una comunidad que no la pasó bien bajo el régimen conservador de Franco) aprovechó el auge de todas estas subculturas como material para sus producciones.

Su particular estilo ha llamado la atención en el extranjero, siendo uno de los primeros directores españoles de la posguerra en hacerlo. Películas como Mujeres al borde de un ataque de nervios, Todo sobre mi madre y Volver lograron tener gran reputación fuera de España, posiblemente más que dentro de ella. 

Y, claro, lograron que Hollywood se apresurara a fichar a Antonio Banderas y Penélope Cruz antes de que otros lo hicieran.

El melodrama intimista de Madres Paralelas

En la última (y dolorosa) obra de Pedro Almodóvar, el melodrama intimista se cruza con la tragedia del Franquismo Español. Yo todavía me debo Julieta (basada en una serie de relatos de Alice Munro), pero en general trato de seguir la filmografía de este director desde hace un par de años.

Mis favoritas de Almodóvar seguirán siendo: “Volver” (2006), “Mujeres al borde de un ataque de nervios” (1988), “La piel que habito” (2011. Sin duda una de sus obras más extrañas) y “Dolor y Gloria” (2019).

Madres Paralelas es una historia linda, aunque quizás no la mejor. Se estrenó en 2021, pero su distribución más amplia fue con su estreno reciente en Netflix. Ahora se dirige a la carrera por los Oscar (con nominaciones para Penélope Cruz como Mejor Actriz y Alberto Iglesias como Mejor Banda Sonora Original).

Ésta seguramente sea la película de Almodóvar con mayor carga política y feminista hasta la fecha. Si bien la acusación a los horrores del régimen franquista ocupa la trama secundaria, no deja de marcar con fuego esta historia, especialmente en aquella inolvidable escena final.

Penélope Cruz está mejor que nunca y tiene gran química con la debutante Milena Smit. Ambas interpretan una dinámica hipnótica que va y viene entre lo erótico y lo maternal. Juntas, las dos mujeres representan los extremos opuestos del espectro de la maternidad.

Madres Paralelas toca algunos compases comunes para quien tiene bastante cine encima. Yo no sabía absolutamente nada de la película y, sólo con la primera escena, le canté a mi esposa todo lo que creía que iba a ocurrir. Pasó exactamente eso.

No deja de ser muy entretenida y lo suficientemente cautivante, con varias firmas del director y gran cinematografía. En general, todos los elementos narrativos y técnicos se fusionan en un todo más que digno. La historia es una exploración fidedigna de cómo los traumas del pasado siguen haciendo ecos en el presente.

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