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lunes, 3 de octubre de 2016

Les Luthiers en Bahía Blanca


Conocí a Les Luthiers de muy chico, tendría no más de 12 o 13 años. Con mi hermano Tomás encontramos unos cassettes de “Mastropiero que nunca”, su obra de 1978.  

Los escuchábamos una y otra vez, si bien había partes del espectáculo que nos perdíamos por ser sólo audio. Pronto empezamos a alquilar los VHS de los shows y, con la llegada de Internet y Youtube, me los descargué todos.

Al día de hoy me sé los gags de memoria. Los cito una y otra vez, aunque las referencias son pocas veces percibidas. Hace varios años pude verlos en vivo en el estadio Ruca-Che de Neuquén. Me considero un fan absoluto del grupo y esperaba con ansias poder volver a verlos.

Desde sus comienzos en 1967, Les Luthiers es una estampa del humor argentino inteligente y uno de los orgullos más grandes del país. Queridos por todos los países de habla hispana, el año que viene va a llegar a 50 años de trayectoria. A excepción de algunas de sus primeras obras de los años ´70, el grupo nunca ha recibido críticas negativas de sus presentaciones. Nunca. Algo totalmente impensable.

Y el día finalmente llegó. Les Luthiers regresó a Bahía Blanca, luego de 15 años, con cinco presentaciones. Fui a verlos en la función del jueves 29/09 y hoy (lunes 3/10) es la última en el Teatro Don Bosco. 

En esta nota quiero contar mis impresiones de la obra.

***

Con razón, son aclamados por la crítica y por un público fiel que los sigue incondicionalmente. Incluso luego del fallecimiento del genio Daniel Rabinovich, supieron continuar con sus creativos elementos musicales de fabricación casera, el humor universal y una teatralidad cautivante.

Hoy el grupo está conformado por cuatro de los originales: Carlos López Puccio, Jorge Maronna, Marcos Mundstock, Carlos Núñez Cortés y el agregado de Martín O´Connor y Tato Turano, que reemplazan en los lugares que dejó vacantes Rabinovich.


Chist, una antología de grandes éxitos

El espectáculo ¡Chist! es el trigésimo cuarto del grupo y una antología conformada por algunas de sus más grandes obras.

Se apoya muchísimo en Bromato de armonio (2002), que para muchos (yo me incluyo) es considerada una de las mejores producciones del grupo. Se estructuran (tanto Chist como Bromato de armonio) alrededor de La Comisión (Himnovaciones), una serie de sketches donde un par de políticos corruptos contratan a un músico popular para modificar el Himno Nacional.

La Redención del Vampiro, Educación Sexual Moderna y La Hija de Escipión también son algunos de mis sketches favoritos que forman parte de “Bromato de armonio”.

El último espectáculo con material completamente nuevo había sido Lutherapia (2008), que me pareció muy bueno. Anteriormente habían hecho Los Premios Mastropiero (2005), que sí me decepcionó un poco. En los próximos meses voy a reseñar esas dos obras en el blog. Afortunadamente están completamente disponibles en Youtube.

En ¡Chist! el gran tema que se toca de fondo es el de la estupidez. Los sketches seleccionados tienen todos la particularidad de jugar mucho con eso: Manuel Darío es un canta-autor totalmente ignorante, La bella y graciosa moza marchóse a lavar la ropa genera risas porque uno de los integrantes no sabe la letra y confunde los papeles, y en Encuentro en el restaurant un violinista no tiene el sentido común para entender cuándo tiene que dejar de tocar. Mientras tanto, en las escenas de La Comisión, hay una suerte de estupidez arrogante con la que se juega para hacer humor político.

La propuesta de Les Luthiers, como lo fue siempre, es mostrarse estúpidos desde lo superficial, pero astutos desde el manejo del lenguaje y el uso de las diferentes artes: la literatura, la poesía, la música. ¡Chist! es un ejemplo perfecto de ello: los juegos de palabras abundan y el espectáculo tiene música de cámara, una ópera, un madrigal, jazz, música popular, boleros y hasta un rap.


Hay algo que es importante remarcar –como explica Marcos Mundstock en este reportaje– y es que ellos no buscan pensar en la actualidad, ni quieren dejar especialmente un mensaje. El número de La Comisión se escribió en el año ´96, con Menem en la presidencia, pero nunca se menciona a nadie con nombre y apellido. Por eso no ha perdido vigencia: incluso hay cosas que tienen más que ver con cosas que suceden ahora que antes.

El grupo le huye a la realidad, y busca que su humor sea atemporal y que no le pegue directamente a nadie. Es un desafió más grande y eleva el humor a una categoría artística más alta. Logran que su humor pueda ser comprendido y disfrutado por todos los países latinoamericanos y también en España. Y, ciertamente, lo logran.

Les Luthiers en Bahía Blanca

Cuando el grupo comenzó a dar la función del jueves 29/09, me emocioné al punto de las lágrimas (lo admito). Su timing para la comedia sigue impecable y dieron un show (de dos horas de duración) de puta madre.


Para alguien que conoce todos los chistes, me sorprendí gratamente al ver que hay nuevo material en viejas obras, y muchos chistes actualizados. Algo que siempre me gustó de verlos en vivo es la complicidad que tienen con el público. Si ven que un chiste funcionó especialmente, lo siguen, improvisan, se divierten.

Hubo un momento tremendo donde Marcos Mundstock, Carlos Núñez Cortés y Martín O´Connor (reemplazando a Rabinovich) se tentaron. Fue específicamente cuando Núñez Cortés hace este juego de palabras con la letra “zeta”:

Marcos Mundstock: ¿Carachacumba es con "c" o con "k"?
Martín O´Connor: Con "ka", con "ka". "Ca-rachacumba", seguro. Es como "efemérides" es con "efe", "efe-mérides".
(Carlos se da la vuelta y comienza a tocar una canción)
Carlos Núñez Cortés:
Se está poniendo oscurito,
tenemos que aprovechar...
Carlos Núñez Cortés: Esa es con "zeta"... Claro, "zeta-poniendo" oscurito, tenemos que aprovechar... Una cumbia que yo había escrito...

Se tentaron los tres, se empezaron a reír, y el público (en lugar de indignarse) empezó a aplaudir. Fue una forma de decirles: “ya fue, están hace más de 40 años haciendo esto, y son grosos. Ríanse, tiéntense, no pasa nada”.

Cuando Mundstock dijo:

Marcos Mundstock: Esto ya es un verdadero taller literario.

El público explotó.

Está bueno cómo actualizaron el material. Por ejemplo, mencionan indirectamente a Crepúsculo y a Lady Gaga, mencionan a los celulares y el e-mail en obras que antes no lo incorporaban. Sin embargo, algunos cambios particularmente no me gustaron.

Particularmente me pasó con La Redención del vampiro, donde un grupo de cumbia es contratado para buscar a Drácula (Mundstock) y reinsertarlo en la sociedad. Acá hicieron pequeños cambios que alteraron la esencia de la obra para volverla más tonta, con un humor más slapstick que recuerda un poco más a Midachi que a Les Luthiers. Fue el único momento donde una modificación no me terminó de convencer.


¿Qué pasó sin Rabinovich?

Hablemos del elefante en la sala. ¿Se notó la ausencia de Daniel Rabinovich en el show? Sí, definitivamente. Pero no se lo extrañó tanto porque el laburo de Tato Turano y Martín O´Connor es magnífico.



Rabinovich era GROSO. Excelente comediante, gran músico, con una voz agradable y gestos inolvidables. El tipo era tan groso que no alcanzó con una persona para reemplazarlo. Martín O´Connor es un ícono de la comedia musical argentina, y tiene una voz increíble. No busca imitar a Daniel, sino que hace lo propio. Y está verdaderamente muy bien. Pero se ve que no tiene el don de la música. Para ello tienen a Tato Turano, que es reemplazante oficial de Les Luthiers desde hace 20 años. Turano es guitarrista, pianista, saxofonista, cantante y compositor, aunque no tiene el nivel de actuación necesario para los sketches más conversados del grupo.

Entre los dos, y gracias a la química innegable con el resto del grupo, hicieron el mejor homenaje que podía hacérsele a Daniel Rabinovich: continuar el legado, seguir haciendo reír a la gente y hacer su trabajo de la mejor manera posible. En ese sentido, no puedo criticarlos.

***

A Les Luthiers se lo aplaudió con cada momento cómplice, con la aparición de la célebre carpeta roja, cuando se menciona a Johan Sebastian Mastropiero y cuando se anuncia “Fuera de programa”. Son unos genios, y no tienen mayores secretos: son el resultado de ingenio, trabajo, coordinación y talento.

Para el final (y fuera de programa) reaparece Carlos Núñez Cortés con Rhapsody in Balls, acompañado por el bahiense Jorge Maronna que utiliza uno los famosos instrumentos inventados por el grupo, el Bolarmonio. De principio a fin, este espectáculo se te hace corto, por su ritmo imparable, la catarata de risas que genera y el inconfundible sabor del humor de calidad.


***

Programa de “¡Chist!”

1.1          Manuel Darío (Canciones descartables)
1.2          La Comisión (Himnovaciones)
1.3          La Bella y Graciosa Moza Marchose a Lavar la Ropa (Madrigal)
1.4          Solo Necesitamos (Canción ecológica)
1.5          La Hija de Escipión (Fragmento de ópera)
1.6          Bolero de los Celos (Trío pecaminoso)
1.7          Educación Sexual Moderna (Cántico enclaustrado)
1.8          La Redención del Vampiro (Hematopeya)
1.9          Encuentro en el Restaurante (Rapsodia gastronómica)
1.10       Los Jóvenes de Hoy en Día (R.I.P al Rap)
1.11       Rhapsody in Balls (Obras fuera del programa, estrenada en Lutherapia)

BONUS TRACK: ¡Chist! en su versión completa, DVD del año 2013:


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6 comentarios:

  1. Alguna vez vi a Les Luthiers. Ya no recuerdo cual era el espectáculo. Así que la debiste pasar bien. Seguramente.
    Rabinovich era un genio, se nota en esa biografía sobre ese músico. Algo en que se destacan en personajes como Mastropiero. Y tienen sorprendentes remates, como se nota en Los jovenes de hoy en día.
    Muy bien que continúen y hayan incorporado nuevos temas.

    Interesante entrada.

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    1. Me encanta "Los jóvenes de hoy en día", ese sketch no tiene precio. Ver a dos viejos cantando rap y riéndose de los adolescentes.

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  2. Fui el año pasado a ver la obra. Concuerdo totalmente con tu entrada, y me pasó lo mismo. Me sorprendieron con esta obra, a pesar de que ya conocía casi todo el programa. Pero le encontrás detalles que ne los dvds o en los videos no se ven.
    Me sorprendieron también como llevan adelante la pérdida del gran Rabinovich.
    Si recuerdo que hacen un chiste de "actualidad". Es en Radio tertulia me parece (por lo que veo en el que fuiste vos no hicieron este sketch). Hay un momento que hablaron de que "hoy está de moda echar gente"... no recuerdo exacto.

    Buen post. Aguante Les Luthiers!

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    1. Ah, Radio Tertulia zafa, no lo considero de los mejores igual. Lo mejor de Radio Tertulia es el grupo inglés "London Inspection" y que los personajes de la telenovela "Alma de Corazón" siempre morían por una picadura de una víbora.
      ¡Saludos!

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  3. me parecían mágicos cuando vivia en Buenos Aires con el tiempo no me he sentido igual las cosas cambian ...
    Gracias
    por recordármelos
    Gracias

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  4. ME encanta los LEsLuthiers.. son mis idolos , muy buena nota y me da ganas de verlos de nuevo

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