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viernes, 10 de julio de 2015

Redimiendo a Dragon Ball GT


No pude evitarlo. Tengo varios posts programados pero tuve que ponerles un freno para referirme un poco a este tema.

El mundo (¿?) está revolucionado con el estreno de Dragon Ball Super, el nuevo animé de Dragon Ball creado por Akira Toriyama, canon, totalmente nuevo y que estrenó el domingo pasado. Las críticas alabaron el primer episodio (yo tengo sentimiento mixtos al respecto) y se viene hablando por meses de este regreso. Las dos nuevas películas (“La batalla de los dioses” y “La resurreción de Freezer”) van a estar contenidas en la historia y todos los que crecimos con Goku “y el resto” sentimos ALGO (no sabemos bien qué) por esta vuelta.

Pero no voy a hablar de DB:Super (aunque hay mucho para comentar) sino más bien de Dragon Ball GT, el primo olvidado (y odiado) de Dragon Ball. Más bien: quiero redimirlo, porque aunque el animé no tiene la fortaleza de Dragon Ball Z, sí creo que tiene muchísimo para rescatar, y sin duda es muy superior a las últimas películas que salieron. Comencemos.

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#SpoilerAlert: se revelan detalles fundamentales de Dragon Ball GT. Si no viste el animé todavía… ¡mala suerte! Ya pasaron casi 20 años, che. En serio, no podés ser tan colgado. ¡Están avisados!

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Toei Animation estrenó Dragon Ball GT en 1996, la secuela no-oficial con 64 episodios, ubicándolo una década después del final de Dragon Ball Z. Fue en un intento de continuar la historia, pero sin contar con el apoyo creativo de Akira Toriyama (quien nunca se entusiasmo con el proyecto). Quisieron volver a los inicios de Dragon Ball, perpetuar la franquicia y expandir el universo (todas cosas que, indudablemente, lograron). A su vez buscaron atraer a un público más joven reduciendo los niveles de violencia.


GT viene de Grand Tour (Gran Viaje) o también Galaxy Tour, haciendo referencia al viaje intergaláctico que deben hacer Goku, Pan (su nieta) y Trunks para recuperar las súper esferas del dragón antes de que la tierra explote.

El primer arco argumental (primeros 21 episodios) se focaliza en esta travesía y es la parte más flojita de la serie. Gran parte de los capítulos son autoconcluyentes y exponen a nuevos villanos (super caricaturizados) que duran un instante. 

Con la segunda parte (la saga de Baby) las cosas remontan muchísimo (episodios 22-40). Luego tenemos otra muy buena saga intermedia (la de Super N°17) que dura 7 episodios (41 a 47) y finalmente llegamos al último arco (“Los Dragones Oscuros”) que tiene sus pro y contras pero que da un buen cierre a la serie en su totalidad (episodios 48-64).

La serie en sí fue mucho menos exitosa que sus predecesoras y cosechó criticas mixtas. Los fans, especialmente, tendieron a demacrarla y focalizarse en todo lo negativo que tiene. Hoy se llegó al colmo de que –con el nuevo  animé– todos los eventos que suceden en GT son alternativos e ignorados por completo en la nueva historia.

Ahora: ¿realmente Dragon Ball GT estuvo tan mal? No digo que sea una obra maestra de la animación japonesa. Sin embargo, la premisa original fue una excelente forma de conocer otros mundos en el universo de Dragon Ball (además de Namek), y de volver a la idea de “aventuras con objetivos” en lugar de un enemigo intentando destruir la tierra porque sí. La exploración siempre fue un contenido propio de Dragon Ball, y en DBZ se había perdido bastante luego de la saga de Freezer. En GT la aventura tiene mucha más presencia y brindó grandes momentos de genialidad. 

► Pero antes de pasar específicamente a eso, me gustaría ser terriblemente quisquilloso y destacar los motivos por los que todos odian a Dragon Ball GT.

¿Por qué el odio desconmesurado hacia Dragon Ball GT?

Los fans incondicionales han encontrado muchísimos agujeros de guion en la historia. Personajes con poderes que nunca antes mostraron en DBZ, poderes de pelea inexplicables, Baby diciendo que Vegeta es el segundo sayajin más poderoso (siendo que Gohan, luego de su entrenamiento final, superó el poder de pelea de un SSJ3). La acción en GT es decente, pero no es nada comparada con DBZ o incluso con Dragon Ball (que era muchas más artes marciales).

Varios critican también el pobre diseño de personajes (recordemos que Toriyama se abrió del proyecto y no participó en prácticamente nada). Las batallas son anticlimáticas, terminando todas demasiado pronto. Sigamos: Piccolo muere, para siempre, y nunca lo reviven. ¿Pan no puede convertirse en Super Sayajin por ser 1/4  de sayajin pero Goku Jr. sí (que es 1/16 de sayajin)? (De hecho, los personajes femeninos nunca brillaron en la serie de Dragon Ball. Quizás Bulma un poquito, y N°18 por momentos… pero that´s pretty much it).

Pan fue un problema porque tiene demasiado protagonismo en GT y nunca fue muy querida por los fans (tampoco la aprecio demasiado). Al personaje nunca le hacen honor y resulta bastante molesta, aunque sus intenciones siempre están en el lugar correcto.

Por su parte, los guerreros Z no actúan como ellos mismos (y hasta son bastante patéticos). Gohan no quiere pelear, Vegeta  está domesticado (¿Ya mencioné su bigote?). 


Mmm... moustache...

Que Vegeta tenga el pelo cortado, de hecho, es un error porque (supuestamente) el pelo de los saiyanjins no puede cortarse (lo explica él en una ocasión). ¡Y por Dios, pobre Goten! Su personaje queda reducido a un simplón más interesado en tener una cita que en ser el adepto guerrero que alguna vez conocimos. Todos, de hecho, son sombras de lo que fueron en DBZ.

Un último inconveniente es que GT le dio demasiado protagonismo a Goku. Es la estrella de show, haciendo que el resto queden subdesarrollados y limitados a breves apariciones. Siempre fue la historia de Goku, pero Dragon Ball Z le dio de chances de brillar a todos (menos a Yamcha, claro). Grandes momentos como Ten Shin Han vs. Cell, Vegetta en Namek o Piccolo contra Cell eran tan importantes como cuando Goku llegaba a salvarles las papas a todos.

Pero, OK. A pesar de todo eso: el animé no es horrible. De hecho, es muy decente y tiene muy buenas cosas. 

¿Cuáles particularmente? Para eso los invito al próximo apartado.

¿Por qué banco a Dragon Ball GT?

Primero que nada: la música. Los temas utilizados para la serie son los más memorables de toda la franquicia. “Dan Dan Kokoro Hikareteku” (“Mi corazón encantado” en la versión latina) se mantiene entre mi top de openings de animé aún hoy. Los ending también suman. Todo el soundtrack de GT está muy bueno realmente, y capta a la perfección la esencia de Dragon Ball.


Goku hecho “chico” es un tema discutible. A mí me pareció una excelente forma de volver a la inocencia que tenía Dragon Ball en sus comienzos y a la idea de “aventura”. Hasta la vuelta de Pilaf es un homenaje a aquellos inicios.

Creo que los creadores de GT encontraron maneras de contar una nueva historia de forma creativa, homenajeando grandes momentos de la serie pero sin repetirse. Por ejemplo, la saga de Baby presenta a un villano temible, original (aunque Ginyu y Babidi tenían poderes similares) y con un pasado que nos remonta a la naturaleza violenta de los sayajins. Gracias a Baby pudimos volver a ver a Goku y Vegeta peleando. Por su parte, la saga de Super N°17 es genial porque tenemos cameos de entrañables villanos anteriores. Goku peleando con Cell y Freezer de forma simultánea es tremendo, ¡y ni hablar de Vegeta volviéndose a reunir con Nappa!

En términos de la trama, DB:GT es mucho menos inconsistente que DBZ. Los arcos fluyen con más naturalidad, prácticamente no hay fillers (eso se debe a que son muchos menos episodios) y finalmente se toca un punto clave en la serie: al fin se dieron cuenta de que las esferas del dragón hacían de deus ex machina arreglando cualquier incoherencia o muerte innecesaria. En el último arco, el sobreuso de las esferas se les convierte en el conflicto final, y eso me pareció una delicia en cuanto a ironía narrativa.

¡Y si no lloraste con el final de DB:GT, no tuviste infancia! Ver a Goku finalmente despedirse es algo que da un cierre más perfecto que el que brindó DBZ.

Otro punto que encuentro positivo fueron las nuevas transformaciones. El SSJ4 tenía un diseño burlesco y extravagante, pero sucede en un punto pivotal de la historia y es la transformación más alta que habíamos visto hasta ese momento.


Todavía no vi la “Resurrección de Freezer” (2015), pero los reviews y el resumen de un amigo me alcanzaron para darme cuenta de lo desastrosa que es. Sí, es muchísimo mejor que “La Batalla de los Dioses”. Pero, ¿en serio? ¿Bills puede volver el tiempo atrás? ¿Freezer entrena unos meses y de pronto está a la altura de Goku? ¿Goku es herido mortalmente con un arma? CON UN ARMA, POR EL AMOR DE DIOS. De “La Batalla de los Dioses” (2013) prefiero ni hablar. Ya dije todo lo que tenía que decir de esa bazofia en mi crítica.

En comparación a esas dos cintas mediocres, Dragon Ball GT es un animé más coherente, más emotivo y muchísimo más interesante. ¿Podría haber sido mejor? ¡Sí, definitivamente! Pero resultó ser un producto digno incluso a pesar de sus deficiencias. Se hizo con las mejores intenciones por creadores que buscaron homenajear el gran trabajo de Akira Toriyama, y no creo que merezca todo el aborrecimiento que la crítica le ha brindado.

Habrá que ver si Dragon Ball Super logra presentar una trama tan atractiva y cerrarme la boca para siempre.

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4 comentarios:

  1. Mucha información, y realmente no recuerdo la mitad de las cosas que mencionas. Habrá que verla nuevamente. Pero la realidad es que yo también tengo mis sentimientos cruzados con GT
    En fin, Goku siempre me cayó muy bien.
    Saludos. Buen post

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    Respuestas
    1. La tengo fresca porque debo haberla vuelto a ver hace unos 4 años... y sí, no niego que genera sentimientos cruzados, pero en mi opinión aprueba.

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  2. A mi Dragon Ball GT me encantó y, aunque hoy en día mi subserie favorita sea Dragon Ball Z (especialmente la saga de Cell) durante mucho tiempo (entre 6ª y 1ª de la ESO) mi favorita era GT. Me encanta la ciencia ficción y GT expandió muchísimo el universo de DB, con la aparición de muchos planetas nuevos con sus respectivas especies (por lo general inteligentes). Además, la resurrección de los enemigos de los guerreros Z y la aparición de los dragones de las esferas como consecuencia de los deseos perdidos a las esferas a lo largo de la serie me parecieron de lo más impactante, así como ver el aumento de la fuerza y poder de Li Shin Ron (aunque me hubiera gustado que, cuando revivieron los enemigos de los guerreros Z, se les hubiera dado más importancia a un número de "malos" mayor del que se dio). También la despedida final de Goku (como tú apuntas) fue emotiva. Gran post, por cierto.

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  3. De todas formas, yo creo que Toei Animation debería hacer un remake de Dragon Ball GT basándose en las opiniones de los fans acerca de esta serie en su página web (si la tuvieran) para mejorarla y que guste a más fans. Sería dejar la serie original como está, en la base, pero hacerla parecer más seria (una de las cosas que más se le critica es lo humorística que era) y corrigiendo los errores que tiene basándose en los comentarios y opiniones de los más críticos, en su página. Quizá, así, podría aumentar su éxito y luego, si realmente la primera parte la consiguiera, con sus correspondientes mejorar respecto a la serie original de GT, podrían llevar a cabo la realización de las sagas que Toei tenía pensadas poner entre las sagas de Baby y Súper A-17. Así, la serie aumentaría de episodios (Toei tenía pensados, originalmente, unos 100 episodios, pero tuvo que acortarla y terminarla más rápidamente por la caída de la audiencia de la serie). Toei sabía lo que quería poner en esas sagas, la serie estaba planeada argumentativamente de principio a fin antes de que la empresa comenzara a trabajar en GT (a diferencia de lo que pasó en Dragon Ball/Z, en las cuales Toriyama fue desarrollando el argumento con la marcha).

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